Ayúdese a sí mismo y ayude a los países en desarrollo con inyecciones de capital específicas".

Este artículo es la traducción de la opinión del CEO Koen The, publicada en el periódico holandés Het Parool el miércoles 14 de octubre de 2020.

Koen The, CEO de la plataforma de inversión crowdfunding Lendahand, afirma que la gente corriente, los pequeños ahorradores y los inversores con (pequeñas) inyecciones de capital específicas pueden marcar la diferencia en los países en desarrollo.

El mes pasado se supo que el Gobierno holandés ha reservado un presupuesto históricamente pequeño para la cooperación al desarrollo el año que viene. En el presupuesto anual, el gobierno ha dado una amplia prioridad al empleo, el bienestar y la educación. Dadas las precarias circunstancias en que se encuentran muchos países en desarrollo debido al brote de coronavirus, las reacciones a esta distribución de las arcas nacionales no fueron blandas.

Especialmente ahora, se necesita desesperadamente un apoyo adicional en las partes del mundo menos desarrolladas económicamente. Sin embargo, no sólo desde un punto de vista altruista se puede justificar el apoyo a los países en desarrollo. Mecenas Bill Gates dijo recientemente que países como India, Kenia y Perú tardarían más de una década en recuperarse económicamente.

Esto no sólo es doloroso para esos países, sino también para nosotros en Europa. Si no ayudamos a los países vulnerables a construir economías sanas, los Países Bajos acabarán sufriendo el aumento de los flujos migratorios y la desaparición de los mercados comerciales. Un aumento de la financiación del desarrollo como solución es dudoso. Este dinero suele filtrarse lentamente a través de capas administrativas antes de llegar a las personas que lo necesitan.

La actitud negativa del gobierno holandés deja claro que hay que buscar otras soluciones. En los países en desarrollo no faltan empresarios dispuestos e innovadores deseosos de arremangarse, dar pasos adelante por su cuenta y así (una vez más) poner en marcha la economía. Lo que falta, sin embargo, son inyecciones financieras para apoyar a los emprendedores.

Hay mucho capital en el mundo. Ahora que millones de personas en todo el mundo corren el riesgo de caer en la pobreza y falta ayuda al desarrollo, ha llegado la hora de un nuevo movimiento de base. La gente corriente, los pequeños ahorradores y los inversores pueden marcar la diferencia en los países en desarrollo con (pequeñas) inyecciones de capital específicas. Protegiendo así a los países en desarrollo y a ellos mismos de problemas importantes en un futuro próximo.

- Koen The, CEO de la plataforma de inversión crowdfunding Lendahand